Describamos a un maestro, es una persona que regularmente tiene todo bajo control, tiene la información actualizada y cuando no la tiene se siente con la serenidad de decir – lo voy a investigar –  pero no pierde el temple, ni se observa nervioso o fuera de lugar.

Cuántas veces hemos escuchado el dicho “ La práctica hace al maestro” pero profundicemos un poco más sobre este dicho y empecemos por definir ¿qué es un maestro? Según la Real Academia Española: 

Del lat. magister, -tri; la forma f., del lat. magistra.

Dicho de una persona o de una obra: De mérito relevante entre las de su clase.

Entonces, si seguimos este tren de ideas, el maestro está unido a hacer cosas, es una persona que practicó, cometió errores, muchos errores, aprendió y siguió intentando, entonces para ser un maestro, primero tienes que adquirir conocimiento, ¿Estás de acuerdo?.

Ya que le dedicaste un tiempo para adquirir el conocimiento, lo internaliza, y de ahí lo pone en práctica, claro que una vez que lo que  empiezas a poner en práctica, empiezan los errores, tienes el conocimiento pero eso no te exime de los errores, falta la memoria muscular, en caso de ser un deporte, o también puede ser el aprender a aguantar la presión mental de hacer eso por primera vez, segunda vez y así sucesivamente, hasta que la presión no está tan presente como en las primeras veces. 

Por lo tanto, un maestro ¿es una persona con conocimiento y práctica? ¿cual es la diferencia de un maestro y un experto?, vamos viendo que dice la Real Academia Española: 

Del lat. expertus ‘experimentado’.

Dicho de una persona: Práctica o experimentada en algo.

Mmmm, entonces uniendo estas dos ideas el maestro y el experto son algo muy parecido, ¿cierto? 

Ahora vamos llegando al punto medular, el experto y el maestro los dos tienen conocimiento, los dos practicaron mucho y saben hacer lo actividad con solvencia y serenidad, ¿que te falta a ti para ser un maestro en tu área?

Te tengo la respuesta que estoy seguro que te va a doler, PONTE A APREDER Y TAMBIÉN A PRACTICAR, casi te estoy escuchando – ¡NO TENGO TIEMPO!- pues hazte tiempo, verifica tus horarios, ¿qué haces durante el día que puedes dejar de hacer?. 

Tan solo observa en tu teléfono ¿cuánto tiempo pasas en las redes sociales?, te sorprenderás el tiempo que le dedicas y no te das cuenta.

¿Cuánto tiempo pasas como dice mi mamá “el cajón” (aunque ahora es rectangular) durante el día?.

El maestro o experto no se hizo sin sacrificar algo, dejó de hacer lo que hacen los demás, como por ejemplo, esas tardes maratónicas de series, esos momentos con los amigos en los que prefirió seguir perfeccionando su arte (cualquiera que sea)  para así poder subir el rango de conocimientos y reconocimiento. 

Para ello tuvieron que enfocarse, dejando las distracciones de lado, crear hábitos que te generen valor, ejercitarte, aprender un más de lo que los demás, ser persistente, hablar con las personas, ser lo suficientemente humilde para saber que puedes aprender más y sobre todo, aplicar tus conocimientos.

llegando al final lo que podemos decir es que si, la practica hace al maestro.

Espero que nos encontremos en un futuro.